Resumen

La arqueología que se practica en Cuba puede considerarse una disciplina científica marginal con relación al número de especialistas, producción científica, interacción académica y nivel de reconocimiento, entre otros aspectos. Si bien las determinantes propias de un país pobre son fundamentales para definir esta situación, el problema se vincula también con otros aspectos del ámbito científico, tecnológico y sociocultural. En este artículo se discuten tales problemáticas. Además se proponen líneas de acción que podrán contribuir a atenuar esta situación.