Resumen

La migración dominicana, como fenómeno social de masa, tiene su origen en la instauración y consolidación de la férrea dictadura (1930-1961) y muerte violenta del dictador Rafael Leonidas Trujillo (30 mayo 1961), la guerra civil e invasión norteamericana de 1965, la apertura de los Estados Unidos a los migrantes no europeos, la llegada y el fortalecimiento en el poder de Joaquín Balaguer (1966-1978), el crecimiento poblacional y la crisis de la industria azucarera en la década de los ochenta El éxodo masivo de los nacionales dominicanos estuvo orientado específicamente hacia Puerto Rico y los Estados Unidos de América, sobre todo hacia la ciudad de New York. Es aquí donde la migración, en cuanto fenómeno dinámico, facilita o hace posible, en un proceso constante de cambios, la transformación del migrante dominicano, quien por encima de la distancia y las fronteras geográficas, logra mantener lazos estrechos con su país de origen, acercándose cada vez más a su tierra natal, raíces, cultura y tradiciones. El Transnacionalismo, pues, lejos de provocar el olvido y el desamor por los suyos y su pequeño terruño, acrecienta, por el contrario, la solidaridad y la dominicanidad.