Resumen

Al repasar los nuevos marcos de ciudadanía que enmarcan nuestro trabajo con niños, niñas y adolescentes, lo hacemos con la fe de reencontrar un sentido del quehacer educativo y desarrollo humano, muchas veces ausente en las escuelas donde NNA son mayoría vital, pero oficialmente ausentes, por lo menos si la práctica educativa no reconoce sus intereses básicos Esto nos lleva a preguntarnos en qué medida las condiciones de exclusión propias de muchos de los entornos de escuelas como República del Uruguay (donde desarrollamos nuestra investigación participante), en Villa Francisca, crean una institucionalidad "diferente" dentro del sistema. En este caso, partimos del supuesto de que, para empezar, las mismas maestras que educan a nuestros niños/as forman parte del mismo entorno de exclusión y pobreza de sus estudiantes, aunque son poseedoras del potencial de cambio propio a todo educador/a.