Resumen

Se presenta una metodología para la determinación del uso óptimo de la tierra de los ecosistemas terrestres y para la valoración de los servicios ecosistémicos que estos producen, alcanzando ambos propósitos a partir del costo de oportunidad del uso agrícola de sus territorios. Dicha metodología se fundamenta en la observación y la aceptación de que la productividad agrícola de la tierra disminuye a medida que aumenta su pendiente, tal y como se puede comprobar en muchos estudios citados sobre la planificación y la vocación de uso de la tierra. Estos estudios también concluyen que la vocación de la tierra de alta pendiente es la conservación para la producción de servicios ecosistémicos. Si la productividad agrícola y, por ende, el costo de oportunidad varían con la pendiente de la tierra, entonces debería existir un punto óptimo por debajo del cual siempre sería más conveniente producir alimentos, y por encima de él convendría más producir servicios ecosistémicos, lo cual podría asegurar que la distribución resultante entre ambos usos de la tierra concilie los objetivos 1, 2, 13 y 15 de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas.