La tercera edición del Congreso Mundial de Ballenas Jorobadas (3rd HWWC 2023) celebrado del 6 al 10 de marzo del año en curso, en Santo Domingo, República Dominicana, suscitó gran expectación a nivel local e internacional. Esto se plasmó en docenas de artículos periodísticos, entrevistas, ruedas de prensa y otros medios de comunicación masivos en varios lugares del mundo. Este Congreso fue creado hace ocho años por la Asociación sin fines de lucros para la conservación de los mamíferos marinos y su hábitat en Madagascar (CÉTAMADA). Fue la primera vez que se celebró en el Caribe y se escogió la República Dominicana por su papel histórico en el estudio y conservación de la Ballena Jorobada (Megaptera novaeangliae, Borowski, 1781).
Este evento se llevó a cabo en el marco de la Década de los Océanos, organizado por diversas instituciones internacionales, que apoyaron a CÉTAMADA y la Universidad de la Sorbona (Francia) en el montaje de esta reunión. Contribuyeron organizaciones locales, como la Autoridad Nacional de Asuntos Marítimos (ANAMAR), el Centro de Investigaciones de Biología Marina Idelisa Bonnelly de Calventi (CIBIMA IBC) de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), Embajada de Francia y su Agencia de Desarrollo en la República Dominicana, Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MIMARENA), Ministerio de Turismo, Fundación Dominicana de Estudios Marinos (Fundemar), Museo Nacional de Historia Natural (MNHN), entre otras.
El acto de apertura tuvo como sede el Auditorio Manuel del Cabral de la UASD, institución que sirvió de plataforma a la Dra. Idelissa Bonnelly de Calventi, a quien se le dedicó el congreso, por sus esfuerzos y motivación en la creación del Santuario del Banco de la Plata, hoy Santuario Marino de Ballenas Jorobadas. También, fue la responsable de la elaboración de un reglamento para la observación de Ballenas Jorobadas, el primer libro sobre mamíferos marinos en República Dominicana e impulsó la observación de Ballenas Jorobadas como una línea de investigación en el país. En este acto se realizó un homenaje póstumo a la Dra. Bonnelly de Calventi, por quienes fueron sus estudiantes en el CIBIMA IBC.
Autoridades nacionales y universitarias, en sus intervenciones, resaltaron la importancia de las Ballenas Jorobadas como emblema de la dominicanidad y la maestra Gladys Rosado relató la historia de los inicios del CIBIMA IBC en el estudio de estos mamíferos. El presidente honorario del Congreso de Ballena el Dr. Peter Stevick, quien conoció a la Dra. Bonnelly de Calventi en los primeros años de estudios de esta especie en el país, resaltó el carisma de la profesora.
El tercer Congreso de Ballenas Jorobadas tuvo como lema “La economía azul para un crecimiento sustentable”, contó con la asistencia de 140 participantes de 38 países alrededor del mundo. El programa de la reunión fue dividido en 11 secciones orales con 38 ponencias, 11 pósteres o carteles, comentados brevemente entre secciones. Contó con la participación de seis conferencistas invitados de renombre internacional: Jaime Bolaños-Jiménez, Erich Hoyt, Lindsey Jones, Lyne Morissette, Joy Reidenberg y Liliana Betancourt, quien reside en el país y presentó los resultados de sus observaciones de comportamiento, estructura de la población, foto identificación y la elaboración de catálogos de cola de Ballenas Jorobadas de la bahía de Samaná. Esta conferencia y una ponencia en modalidad póster, presentada por investigadores del CIBIMA IBC, representaron los trabajos de investigación que se están realizando en el país en torno a la especie.
El programa estuvo enfocado desde un punto de vista científico multidisciplinario, que abarcó diversos temas sobre la biología, genética, impactos por actividades humanas y mitigación. De igual manera, la utilización de imágenes satelitales, tecnologías vanguardistas y programas de procesamiento de imágenes eficientes para el estudio de áreas de alimentación, conservación, distribución, rutas migratorias y foto identificación. Además, se presentó la utilización de acústica pasiva para detectar poblaciones, identificación de individuos, evolución de las canciones, entre otros aspectos. La integración de ciencia ciudadana para obtener información, enriquecer las bases de datos y la trasmisión cultural, ha sido ampliamente aceptada por los investigadores. El arte basado en estos cetáceos también encontró espacio, y se puso de manifiesto en los souvenirs de cola de ballena elaborados en metal y madera que se les entregó a los invitados especiales, además de las pinturas y serigrafías exhibidas durante el Congreso.
Se realizó una sección oral especial presentada por el maestro Osvaldo Vázquez, dedicada a poner al público en contexto histórico de la creación del Santuario de Ballenas Jorobadas de la República Dominicana, las políticas de manejo y sucesivos estudios de investigación con apoyo de reconocidos investigadores internacionales, la implementación de los primeros estudios de genética, estructura de las poblaciones, rutas migratorias y el uso de técnicas de foto identificación, principalmente.
La Dra. Saloma, presidente de CÉTAMADA puntualizó que las ponencias sirvieron de contribución para el avance en el conocimiento a nivel mundial y los desafíos actuales, en diversos aspectos de esta especie. Los esfuerzos internacionales para frenar el declive de la biodiversidad debido a la presión en los océanos, a través de áreas marinas protegidas. La economía generada de manera sostenible con la observación de ballenas y el crecimiento económico de las comunidades circundantes, también encontraron lugar en este evento. Al igual, la lucha contra el calentamiento global y el papel que podrían desempeñar las ballenas en descarbonizar los océanos como solución basada en la naturaleza fue novedoso. Al tiempo, que se tomó en cuenta la trasmisión, formación y desarrollo de capacidades, con la creación de oportunidades para jóvenes y futuros investigadores. Con esta idea en mente por parte de los organizadores, fue notable la asistencia de jóvenes de diversos países, incluyendo unos 10 estudiantes en su mayoría de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, auxiliares de investigación del CIBIMA IBC y otras instituciones locales.
Durante el Congreso se desarrollaron tres talleres: Economía Azul, dirigidos por la maestra Nina Lysenko e Israel Santana del MIMARENA, un nuevo concepto económico que estudia el valor generado por los recursos marinos, utilizando métodos sostenibles. Se presentó el ingreso generado por observaciones de ballenas jorobadas en Samaná, un área protegida con una visitación en 2022 de más de 100,000 personas, de los cuales el 80 % de ellos fueron extranjeros, que junto a otras actividades en la zona superan los RD$31 millones de pesos. Participaron activamente representantes de las principales compañías turísticas de observación de ballenas jorobadas en la bahía de Samaná, se discutió la importancia de realizar los ajustes necesarios para diversificar la oferta ecoturística de la zona, actualizar los planes de manejo, agenciar las experiencias alcanzadas en otras áreas para una mejor planificación y gestión de estas actividades en la zona.
El taller “Ambientes marinos y actividades de los puertos”, dirigido por el Dr. Nadege Gandilhon de la Universidad de la Sorbona, es la primera vez que se realiza y puso de manifiesto la necesidad de colaboración basada en confianza entre los científicos y operadores de puerto para mejorar las estrategias de acciones ambientales que sean sostenibles. Por último, el taller “Herramientas para el manejo de mamíferos marinos”, dirigido por Laurie Hec, consistió en un paquete de estrategias o herramientas orientadas, a los responsables del manejo y gestión de áreas marinas protegidas, para lo cual se utiliza intercambio de capacidades, trasmisión de conocimientos y guías para la comunicación efectiva. En el taller se fortaleció la asociación con el Santuario de AGOA y Áreas Importantes de Mamíferos Marinos (IMMA), se discutió con otras organizaciones y proyectos para el uso del paquete de herramientas en futuras investigaciones en áreas marinas protegidas.
El congreso concluyó con un viaje de observación de los últimos ejemplares de ballena que quedaban en el Santuario Nacional de Ballenas Jorobadas, en Samaná antes de marcharse a su viaje anual, para esperarlas el próximo año de vuelta a su hogar, al lugar donde nacieron.